Explorando la memoria histórica de Norte de Santander
Un viaje digital hacia la memoria y la verdad. Únete a nosotros en un recorrido único a través de las historias, la cultura y las voces de nuestro departamento. Descubre cómo la historia se convierte en esperanza y aprendizaje para un futuro mejor.
En conjunto con
Asomunicipios, comprometido con el apoyo y la difusión de los procesos de memoria en la región, estableció un convenio con la Universidad Simón Bolívar, sede Cúcuta, en colaboración con el programa de Ingeniería Multimedia. Este programa, reconocido por su enfoque multidisciplinario en la integración de tecnología y creatividad, seleccionó a la estudiante Indira Sánchez Yáñez para llevar a cabo sus prácticas profesionales con nosotros. Su labor ha sido fundamental para la creación y desarrollo de este proyecto, el cual aspiramos a mantener y expandir en el futuro, en aras de preservar y difundir la historia y la cultura de nuestro departamento.
¿Qué es la ruta de la memoria y la verdad?
La ruta de la memoria y la verdad es una iniciativa que nace del diálogo de instituciones públicas, del sector educativo, cultura, organizaciones de sociedad civil y victimas en la región. Es el camino compartido que quieren andar las y los gestores de memoria de la región a partir de una agenda común de recuperación de la historia del departamento, su conocimiento público y apropiación social. Tiene una intención pedagógica: que el conocimiento de esta historia contribuya a la prevención y no repetición de las violencias. – César Osorio
Capítulo 1: Brisas del Polaco
En Norte de Santander residen muchas historias e iniciativas de la población que ha sido afectada por el conflicto armado. En esta ruta, proponemos como punto de partida a: Brisas del Polaco, un barrio pintoresco y vibrante en el municipio de Ocaña, Norte de Santander. Este pintoresco enclave ha sido testigo de la valentía y la determinación de una comunidad que se ha unido para superar desafíos y forjar un futuro mejor. Únete a nosotros mientras nos sumergimos en la memoria viva de este fascinante barrio a través de dos productos multimedia que encontrarás a continuación.
¡Desliza para ver las dos partes de la infografía!
¡Dale play para que escuches la historia de Brisas del Polaco!
EPISODIO 1 - BRISAS DEL POLACO
¿Cuánto sabes de Brisas del Polaco?
¡Ponte a prueba y demuestra cuánto has aprendido sobre la fascinante historia de Brisas del Polaco! Responde preguntas clave sobre la comunidad. ¿Estás listo para el desafío? ¡Demuestra tu conocimiento y sumérgete en la rica historia de este vibrante barrio!
Conoce a Brisas de Paz: Guardianes de la Memoria y la Convivencia
¡Descubre el poderoso trabajo del colectivo Brisas de Paz! Conformado por tres mujeres, este colectivo difunde la memoria y el legado de la Comisión de la Verdad en todo tipo de escenarios. A través del diálogo y la promoción de acuerdos para una convivencia armoniosa, replican el proceso que los definió. Su enfoque se dirige especialmente hacia los más jóvenes, preservando así la identidad y la memoria histórica de su barrio. Sigue su labor a través de su cuenta de Instagram y descubre cómo continúan enriqueciendo la comunidad con su valioso periódico. ¡Únete a la narrativa de paz y convivencia que están tejiendo en Brisas del Polaco!
¡Cuéntanos tu historia!
¿Tienes una historia que compartir y que crees que debería ser incluída en nuestra ruta digital? Queremos escucharte, completa nuestro formulario y dejános contar tu historia
¡Conoce otras iniciativas por la reconstrucción de memoria histórica en nuestro departamento!
Embárcate en la travesía del «Intercambio de Experiencias: Memoria, Verdad y Territorio 2023». Múltiples organizaciones del país convergieron en cinco ejes fundamentales: Prevención de Violencias, Escucha y Diálogo, Arte y Cultura, Educación y Pedagogía, y Turismo por la Memoria. Este encuentro tuvo como resultado herramientas valiosas. Es inspirador ver tantas organizaciones y personas interesadas por estos procesos en nuestro territorio. Visita la página del encuentro para profundizar aún más en esta experiencia transformadora (dándole clic a la foto).
¡Revisa la galería de fotos del encuentro!
Centro de recursos del proyecto
Capítulo 2: Casa de la Memoria El Aserrío
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La Casa de la memoria, está ubicada en el corregimiento El Aserrío, jurisdicción del municipio de Teorama; fue construida bajo la decisión de la Junta de Acción Comunal, la alcaldía municipal y aportes de cooperación internacional a través del programa Colombia Transforma.
En un primer piso se encuentran instrumentos, herramientas de trabajo y obras de arte utilizadas por los primeros pobladores. Seguido se halla un auditorio que en su interior detalla la línea de tiempo desde que se fundó el corregimiento en 1970.
En el segundo piso se instaló la Biblioteca Pública que lleva el nombre de Carmelo Velásquez en honor al primer bibliotecario del pueblo quien fuera asesinado 2 años después de la realización del paro campesino en el año 1987.
En el 2002 se registró la incursión paramilitar (AUC) que luego de la masacre, generó el desplazamiento masivo, quedando solo 4 familias
La Casa de la memoria, es un refugio de los episodios vividos por cientos de familias víctimas del horror del conflicto. En el 2018 fue inaugurada como un espacio multifuncional, pues desde allí se imparte formación artística de la Casa de cultura de Teorama que tiene un formador radicado en el corregimiento para acompañar a niños y jóvenes en este valioso proceso.
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Capítulo 3: Columna de la Libertad de los Esclavos
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La columna de la libertad de los esclavos en Ocaña es un elemento muy importante dentro de la historia de la región y el país- surge a raíz de la abolición de la esclavitud 1851 por parte del gobierno de José Hilario López. Agustín Núñez siendo gobernador de la provincia de Ocaña en ese entonces, asume esa ley y decide hacer un elemento que diera bases para leer el significado de la abolición. El monumento se construyó en medio de la plaza mayor de Ocaña, región donde no solo existían esclavos de raza negra, sino indígenas y mulatos.
El monumento es una columna fajada, con cinco anillos y un gorro frigio en su remate, concebida con una protección encalada a base de cal. No hay información clara de por qué se construyó con cinco añillos, y aunque muchos relacionan estos con las naciones que libertó Bolívar, no tiene nada que ver, pues son episodios en fechas distintas. Por sus elementos estilísticos, tuvo que cambiarse por las intervenciones de las que fue objeto.
Es el único monumento en Latinoamérica que eleva un mensaje de la abolición de la esclavitud.
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Capítulo 4: El Aeropuerto
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La ruta de la memoria nos lleva hoy a El Tarra, lugar que en la década de los 30 atrajo miles de miradas de norteamericanos por su riqueza petrolera. La empresa estadounidense SAGOC en 1930 lideró la construcción del aeropuerto por miles de trabajadores, en medio de enfrentamientos con la comunidad Barí, quienes – según historiadores-fueron hasta bombardeados por los aviones gringos para poder arrebatarles esta parte del territorio del Catatumbo.
Con la exportación del petróleo desde El Tarra, podría decirse que llegó un nivel de desarrollo económico para Catatumbo, servicios impensados en otras regiones de Colombia; acceso a servicios como telefonía, energía, cine entre otros. Sin embargo, todo el lugar era altamente custodiado, y no se permitía el acceso a quienes por años lo habitaron.
Llegó el año en que los norteamericanos cerraron y con esta decisión la manera de que las comunidades suplieran sus necesidades por sus propios medios, situación que desencadenó el paro del Nororiente.
Aunque no se conoce un documento de propiedad, quien heredó las tierras ocupadas por los norteamericanos fue Adolfo Arévalo Abril, un médico que trabajó para las petroleras, ayudó a organizar Juntas de Acción Comunal y tuvo varios hijos en El Tarra.
Hoy, solo el recuerdo de la pista perdura en una finca entre las veredas Tarra Sur y Motilandia, a cinco minutos del casco urbano de El Tarra, alguna señalización se alcanza a ver a lo lejos, tan perdida como la esperanza de algunos en que este lugar resurja.
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